lunes, 18 de marzo de 2013

¡Aaagua! pa mis melones.


Llamativo el título, ¿verdad? Pues, en esta ruta de la que quiero dejar constancia, ya sabéis cual es el elemento predominante.
Llevábamos varios días mascullando, Jesús Vela y yo, qué hacer este fin de semana. Me envió un correo con la ruta del open que realizaban al día siguiente, pero claro, 47 km.... pues, nos parecía poca cosa (no hay remedio para nuestra locura). Ya estaba liada, salimos desde Villarrubia, hacemos la rutilla que tanto nos gusta por la Ermita de la Virgen de la Sierra y hacemos la pueba del open y luego según la hora... veremos por donde volvemos, por la carretera o (locura de cabeza) por la vía pecuaria. Así lo pusimos en facebook por si se venía alguien, y así fue se unió a la expedición Emilio Molina (que tampoco anda bien de la cabeza).
Menos mal que no me llevé la botas buenas y preferí llevar zapatillas normalillas, total, frío parece que no iba a hacer (gran acierto).

La ruta la comenzamos con los sube bajas constantes que hay que tomarse con calma hasta llegar a la Ermita, y una vez agrupados tras perdernos todos al ir cada uno por distintos sitios de la Ermita, emprendemos el primer tramo técnico, ese sendero estrecho, donde solo cabe el manillar, curveado, con la humedad justa para que las ruedas realicen su función a la perfección, vamos... una delicia. Para terminar bajando por un arroyo lleno de agua (primera aparición) y piedras donde la cosa se pone más seria y donde Emilio deja rienda suelta a su locura. Después tras pasar por la Fuente del Membrillo , entramos a Fuente el Fresno por el camino del Peñoncillo. Hasta aquí todo conocido, ahora la prueba del open. Tras algunas dudas sobre por donde empezar, culpa mía porque ahora presto poca atención al gps, decidimos empezar por el molino para hacerlo con fuerzas, y así fue, con mucha precaución subimos a buen ritmo y una vez agrupados hicimos la bajada por un sendero especialmente marcado por dos hileras de piedras para la prueba del día siguiente.

Seguimos trayecto hasta encontrarnos con el causante de la humedad severa de mis pies, el Arroyo del Cambrón, (por no decirle ca...), que aunque digan que llevaba más agua en días anteriores, no estaba nada mal ahora, hasta el eje de la rueda y con buenas piedras gordas debajo. Otra vez jugada del gps (en realidad excusa mía para cruzar el arroyo varias veces), un cruce que al girar tantas veces la bici ya no sabía donde estaba, tres veces cruce el arroyo. Los pies bien, bien mojados hasta la rodilla, pero como no hacía frío... pues a gusto. Y encima se pone a llover, poco pero llueve y estuvo un buen rato. Seguimos camino y cruzando por distintos sitios este arroyo otras dos o tres veces hasta encaminarnos hacia la sierra de la Calderina, donde tras una larga subida, la última rampa nos hizo doblegar y plantar el pie. Una zona bonita, Jesús Vela como otras veces disfrutando de la sierra y Emilio, ya un poco tocado, disfrutó luego, pero en la larga bajada, llena de barro y rocas y lo suficientemente ancha para bajar a buen ritmo.

A partir de aquí comenzaron las dudas, la hora se nos echaba encima, intentamos realizar la primera aproximación a Fuente el Fresno siguiendo la ruta, que nos llevó primero por peazos totalmente impracticables y luego por caminos anchos y buenos en bajada donde le dimos bien a los pedales. Al final, antes de hacer el último bucle decidimos volver a Fuente el Fresno y después a los coches. Cogimos el camino más corto que aparecía en el gps viendo al fondo el molino que antes habíamos subido (¡¡¡ERROR!!!), otra vez el Cambrón, esta vez parecía que era con el fondo de cemento y bueno... sin pensarlo, pa dentro y zas... la bici se pone a flotar y se la lleva la corriente, yo con el agua a la cintura la agarro, dudo y salgo corriendo del agua. Ya me da igual decido cruzarlo a pie con el agua a la cintura, la bici arriba y, ya en la otra orilla, escurrir los calcetines y mis viejas zapatillas (acierto).

Bueno ya solo nos queda, reponer agua y rodar por la carretera, 16 km, a muy buen ritmo para apaciguar al máximo a la máquina de regañar (excusa: Emilio que ha pinchado 3 o 4 veces). Así que las raciones del Rulo como en otras ocasiones, para otro día (pero quedan anotadas en los cortes pendientes). Esta fue la ruta:
Villarubia - Fuente el Fresno (¡Agua pa mis... por PabloS76




miércoles, 13 de febrero de 2013

Bautizo de Diego por el senderete

 
 
Hemos tenido que esperar varios años y a que en Herencia sea fiesta por eso de los carnavales, para que Diego haya salido por la tarde y ni más ni menos que en compañía de Pablo.
La ruta era a Criptana y posiblemente hacia Quero, pero debido al viento reinante decidimos ir hacia el Cristo Villajos y allí luego decidir. Y claro, con Pablo por medio, la ruta para el Cristo no era otra que los senderetes de la EFA y alrededores.
Y no ha habido perdón, pues realizamos cada uno de ellos. De fondo hemos llevado la voz de Diego maldiciendo y blasfemando a causa de la mala situación de los senderos transitados a lo largo de toda la tarde. Creo recordar que solo cogimos un camino en condiciones, el que nos acerca a Alcázar desde Criptana.
Y no solo han sido los senderos del Cristo, pues al llegar al palomar del Cristo y tras tomar algo de fruta, decidimos ir dirección Criptana por más senderos y al llegar a la sierra de los molinos, Pablo nos lleva a realizar los senderos "bajos" de la Sierra de Criptana.
A pesar de todo, el amigo Diego estaba eufórico a pesar de sus quejas durante el trayecto. Como decía su buen amigo Paco "¿Que se habrá tomado este hoy?


@antonio_garrido

miércoles, 2 de enero de 2013

     Después de la buena y clara descripción de la última salida del año por parte de Antonio a Los Hinojosos pasando por Finca Antigua y VQ , no me queda otra que compartir con vosotros algunos recuerdos de este pasado año 2012, nuestras salidas, nuestras clásicas salidas y algunos de  los buenos momentos que juntos disfrutamos  y  que hacen que cada año que pasa sigamos descubriendo y compartiendo  nuevos rincones y nuevos compañeros.
     También aprovecho para agradecer el pequeño esfuerzo que cada uno de nosotros realizamos para que esto siga funcionando y ya sabéis : nos vemos donde  siempre...


martes, 1 de enero de 2013

Ruta fin de año 2012

Desde hace unos días, veníamos definiendo cual sería nuestra ruta fin de año. Las primeras propuestas pensaban en realizar una salida hasta Urda, pasando por el Reventón e incluso por el cruce de caminos de la sierra de Madridejos. Hacerla desde Alcázar, suponían un total de 130 Km lo que sumado a las subidas incluidas, supondrían unas 7-8 horas, algo difícil de realizar en una mañana.


Ruta en bici 1931626 - powered by Bikemap 


La idea de Urda era por repetir las salidas que otros años hemos hecho en éstas fechas navideñas, en las que subíamos Calderina y Reventón, pero con inicio y fin en Urda.
Finalmente se propuso una más corta (105 Km) y con menos desnivel que la de Urda: concretamente la ruta que realizamos entre Alcázar y Los Hinojosos, pasando por localidades como Miguel Esteban, Quintanar de la Orden, Los Hinojosos, El Toboso y Campo de Criptana, con parada para el almuerzo en la Bodega Finca la Antigua y meta volante en la Bodega Venta de Quijote.
Con salida a las 8 de la mañana, solo tres componentes del grupo nos encontramos en el lugar de quedada: Paco, JJParra y Antonio (el que suscribe). Con niebla cerrada y temperatura ligeramente bajo cero comenzamos nuestra jornada por el camino de Los Anchos con dirección y Quintanar de la Orden siguiendo la interminable Vía del Hambre.
A pesar de haber avanzado en casi 2 horas, el día nos ofreció unas temperaturas más bajas aún, al tomar el camino de Quintanar a Los Hinojosos, con niebla cerrada y temperaturas de hasta -3ºC, aunque el cierto desnivel de la zona nos hizo entrar en calor. Como sería el frío que a Paco y a Parra se le helaron los cambios (plato y casette) y tuvieron que realizar la subida siempre con el mismo desarrollo.


Cuando llegamos a lo más alto del Monte (unos 870 m de altitud y a 50 Km de Alcázar) la niebla desapareció y nos permitió disfrutar de las sensacionales vistas que ofrece la Bodega Finca Antigua, en la cual realizamos una parada técnica para almorzar como es debido: queso, salchichón, chorizo y picos aportados por Parra, que posteriormente fueron completados con una polvorones y mistela que llevó Paco. Mientras disfrutábamos del almuerzo las bicicletas fueron descongelándose dejando un charco de agua considerable.
La Mistela fue la gasolina que nos permitió continuar la ruta y adentrarnos nuevamente en la niebla helada que nos acompañó hasta nuestro regreso a Alcázar. A través de un terreno de subidas y bajadas, aparecimos en la Venta del Quijote, lugar donde se ubica una de las bodegas más interesantes de nuestra comarca manchega. Pasamos de largo y continuamos hacia El Toboso, donde tomamos el camino de Alcázar de San Juan, el cual seguimos unos 10 Km para tomar uno de los caminos que conducen a Campo de Criptana. Ahora el frío y los Km acumulados comenzaron a notarse en nuestro cuerpo, de manera que la subida larga y tendida hasta la villa de los molinos fue algo angustiosa e interminable.
Aunque aparecimos en la sierra de los molinos, a causa de los densa niebla que persistía aún (13:15 horas), no pudimos ver molino de viento alguno.
De hecho, en nuestro trayecto final que nos conducía a Alcázar de San Juan, tampoco pudimos disfrutar de las vistas de nuestro cerro de los molinos. Llegamos prácticamente como salimos: con niebla y temperaturas muy bajas. Eso sí, con 105 Km a la espalda y con 6 horas disfrutando de la bici y los caminos de La Mancha. Por desgracia, poco pudimos disfrutar de los paisajes de nuestro entorno, pero la niebla será la responsable de que más adelante repitamos la ruta, incluyendo además alguna copa de vino en las bodegas visitadas. En ésta ocasión, el vino nos lo tomamos en el Pichi, donde acompañados de suculentas tapas, nos tomamos un tinto tempranillo "Finca Antigua".